Principios y protocolo de tallado para prótesis fija

El protocolo de tallado para prótesis fija es una parte fundamental para la restauración de una pieza dental perdida, lo que permitirá mejorar la estética, durabilidad y salud bucodental de nuestros pacientes.

En este artículo te contamos en qué consiste este proceso. Además, te recomendamos echar un vistazo a nuestro curso de estética dental para que puedas profundizar y especializarte aún más en este tipo de prácticas.

Conocer y estar al día de las principales técnicas y dominar el protocolo de tallado para prótesis fija puede marcar la diferencia y suponer un factor determinante para el éxito de los tratamientos que recibirán nuestros pacientes.

¿Qué es un tallado dental?

Se conoce como tallado dental al proceso que se realiza como paso previo a la colocación de una corona o un puente dental. Durante esta fase del tratamiento, realizaremos el tallado de los dientes naturales con el fin de dejarlos redondeados y preparados para poder colocar y pegar los dientes metálicos o las fundas sobre los mismos.

El protocolo de tallado para prótesis fija es fundamental para conseguir unos resultados positivos a nivel estético y mejorar la durabilidad de las piezas de la dentadura del paciente que han sufrido algún tipo de daño, pero aún cuentan con una raíz y hueso en buenas condiciones.

El éxito de dichas restauraciones dentales mediante prótesis depende, en gran medida, del seguimiento de un adecuado protocolo clínico de tallado, de acuerdo a los principios científicos, mecánicos, biológicos y estéticos establecidos.

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Tipos de prótesis dentales fijas

Existen tres tipos de prótesis dentales fijas, dependiendo de su tamaño:

• Coronas o fundas: Consiste en la colocación de una prótesis en un solo diente del paciente, que previamente ha sido sometido al protocolo de tallado para la colocación de la prótesis fija.
• Puentes dentales: Se utilizan para reemplazar, por lo menos, un diente. Esta tipología de prótesis está conformada por un mínimo de tres piezas dentales que se colocan sobre los dientes originales.
• Dentadura completa: Se trata de una prótesis completa que suele utilizarse cuando el paciente sufre de edentulismo. Este tipo de prótesis está fabricada en metal y se coloca encima de una encía artificial que va fijada mediante tornillos sobre los implantes dentales.

¿Qué ventajas tienen las prótesis dentales fijas frente a las removibles?

Las prótesis fijas son elementos que se hacen a medida para la boca del paciente, con el principal objetivo de sustituir las piezas dentales perdidas, dañadas o desgastadas. De esta manera, el paciente podrá recuperar la funcionalidad total de su boca, además de mejorar su estética.

Las prótesis dentales fijas no se pueden retirar, por lo que se mantendrán de forma permanente en la boca de nuestros pacientes.

Las principales ventajas de las prótesis dentales fijas frente a las removibles son:

• Comodidad: Se trata de una de las principales ventajas de las prótesis fijas frente a las removibles ya que el paciente no tendrá que preocuparse de retirarlas ni limpiarlas tras las comidas. Tampoco tendrá que prestar atención a si se mueve la prótesis ni necesitará productos adhesivos para mantenerla fijada.
• Seguridad: El paciente podrá disfrutar de una mayor seguridad en sus relaciones sociales ya que podrá hablar y masticar sin problemas.
• Estética: Los resultados estéticos obtenidos con las prótesis fijas es mucho mejor y más natural que el que se obtiene con las prótesis removibles.
• Sujeción: Otro aspecto destacable de las prótesis fijas frente a las removibles es que las primeras son mucho más seguras gracias a que se colocan sobre el propio diente o implante dental del paciente, lo que evita que se mueva y provoque problemas.
• No generan molestias: A diferencia de las prótesis removibles, las prótesis fijas no provocan roces y molestias en las encías.

También es importante tener en cuenta que existen dos tipos de prótesis dentales fijas dependiendo del método de colocación empleado: prótesis fijas sobre el diente natural del paciente o sobre implantes dentales (tornillos que sustituyen a la raíz del diente natural en caso de pérdida del mismo).

En el supuesto de que vayamos a colocar la pieza sobre el diente natural del paciente, tendremos que prestar especial atención al protocolo de tallado para prótesis fija, con el objetivo de que quede correctamente alineada y situada sobre la dentadura del paciente.

Aspectos a tener en cuenta sobre el diente pilar para una prótesis fija

Ahora que ya hemos hecho un breve repaso por qué es y las principales ventajas de las prótesis dentales fijas, vamos a detenernos en analizar ciertos aspectos importantes que debemos tener en cuenta sobre el diente pilar que utilizaremos para que la colocación de la pieza resulte todo un éxito y pueda realizarse el tallado sin problemas.

En primer lugar, debemos analizar la vitalidad pulpar del diente (en caso de que no se haya sometido a una endodoncia con anterioridad). Esto es importante ya que, al tallar dientes vitales, se acaban exponiendo los túbulos dentarios, siendo susceptibles a sufrir agresiones en el tejido pulpar.

También es necesario analizar el estado del periodonto, buscando que sea sano y favorable para poder llevar a cabo de manera correcta el protocolo de tallado para prótesis fija. Se considera, por tanto, que una encía clínicamente sana y en condiciones para poder someterse a este tipo de tratamientos es aquella sin tártaro supra ni subgingival, así como sin inflamación, supuraciones ni sangre, entre otros aspectos importantes.

Otro aspecto importante a tener en cuenta para el protocolo de tallado para prótesis fija es la altura coronaria cérvico-oclusal, que debe ser mínimo de 3 mm. En el caso de que el diente pilar no cuente con dicha medida, será necesario poner un sistema espiga-muñón para obtenerla y que el tratamiento resulte exitoso.

Protocolo de tallado para prótesis fija y B.O.P.T.

La B.O.P.T. (Biologic Oriented Preparation Technique o Técnica de Preparación Biológicamente Orientada) es una técnica prostodóncica simplificada que permite lograr un cambio en la forma y el grosor de los tejidos blandos que se encuentran alrededor del diente, favoreciendo la integración de la pieza, así como una mejor estabilidad de los tejidos cercanos al mismo.

Lo que se consigue con la B.O.P.T., por tanto, es una modificación de la unión entre el diente y la prótesis para provocar cambios a nivel gingival, lo que ayuda a la cicatrización, logrando el engrosamiento necesario de los tejidos blandos y un contorneado gingival estético sin que resulte necesario recurrir a procedimientos quirúrgicos de mayor complejidad.

A continuación, vamos a definir las diferentes fases de la técnica B.O.P.T. que se deben seguir para el protocolo de tallado para prótesis fija:

Fase de preparación del diente y los tejidos blandos

Con este proceso, se pretende crear un espacio para la estabilización de los tejidos que favorezca a las fases posteriores del protocolo de tallado para prótesis fija.

Lo primero que debe realizarse es un sondaje periodontal con el objetivo de evaluar el estado de salud del diente. Empezaremos por las caras interproximales y, a continuación, realizaremos una reducción inicisal de, aproximadamente, 2 mm hasta que se vea con claridad la línea que separa el esmalte y la dentina.

Tras esto, tendremos que hacer un corte a 45º aproximadamente del reborde incisal sobre la cara vestibular, para conseguir un plano inclinado. Después, realizaremos una reducción axial circunferencial supragingival para, a continuación, iniciar la preparación intrasulcular y la reducción palatina.

En el caso de la preparación del tejido blando, lo que se pretende es producir un sangrado inducido por abrasión rotatoria, lo que producirá la formación de un coágulo sanguíneo que estará soportado por la corona provisional.

Restauración provisional

El siguiente paso del protocolo de tallado para prótesis fija sería la restauración provisional que sirve para proteger el muñón, mejorar su estética y funcionalidad y, además, ayudará a estabilizar el coágulo creado durante la preparación gingival.

Tras realizar el tallado y la preparación gingival, lo siguiente sería la fase de rebasado y ajuste del provisional. Tras esto, debemos rellenar el interior del provisional y, una vez haya perdido el brillo, se colocará en la boca.

Impresión de la restauración definitiva

Una vez esté estabilizado el tejido blando, podremos iniciar la impresión de la restauración definitiva a través de una técnica de doble hilo: uno de tres ceros impregnado con astringente y otro que variará entre cero y uno, según el espesor del tejido.

Tendremos que esperar 5 minutos para alcanzar el efecto deseado del astringente y del hilo de retracción y, a continuación, haremos un lavado y secado de la preparación antes de retirar el segundo hilo.

Impresión del modelo de laboratorio

A través de esta técnica, conseguiremos dos modelos de yeso de tipo IV: por un lado, el primer modelo nos servirá para la confección de la estructura y, por otro, el segundo modelo (el modelo maestro) nos servirá para conservar toda la información de los tejidos blandos y comprobar y ajustar las parábolas gingivales.

Fase final: restauración definitiva

Durante esta fase final, se pretende copiar el contorno que hayamos conseguido con los provisionales, por lo que es importante realizar una buena impresión de los provisionales con el objetivo de que el técnico cuente con una guía durante la elaboración de la prótesis fija definitiva.

Para esta fase, es fundamental una buena selección de los materiales, así como llevar a cabo el proceso de cementación de forma cuidadosa para que el resultado final sea el adecuado.

Cuidados tras el tallado para prótesis fija

Ahora que ya hemos hecho un breve repaso por el protocolo de tallado para prótesis fija y la técnica B.O.P.T., vamos a enumerar los cuidados necesarios tras esta intervención para que los resultados sean del todo satisfactorios:

• Evitar comer alimentos muy duros con la prótesis fija, con el principal objetivo de cuidar el estado de la misma.
• Mantener una correcta higiene bucodental tras cada comida, sobre todo antes de dormir, ya que es cuando se produce menos saliva y el efecto protector disminuye.
• Utilizar un buen cepillo dental y pasta dentrífica con flúor.
• Usar cepillos interdentales e hilo dental.
• Programar revisiones periódicas cada 6 meses para comprobar que la prótesis está en correcto estado y no hay ninguna caries ni inflamación en las encías de la zona tratada.

Siguiendo estos consejos, podremos asegurar que el paciente mantendrá una adecuada salud bucodental, por lo que no requerirá de cuidados especiales necesarios tras la intervención.

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